En su programa de televisión, "Shop This Room", ¿cómo demostró que el diseño está al alcance de todos?

Danielle: En Shop This Room, me centré en lo que uno tiene en su propia casa. ¿Qué tiene valor? Elija algo que le hayan dejado como herencia, que haya encontrado en un mercado de pulgas, o algo que tenga un significado para usted por alguna razón. Simplemente, algo que le encante. Entonces, comience a crear basándose en eso. Es una buena manera, y muchas veces muy emotiva y hermosa, de pensar en su hogar. Simplifique y pregúntese: "¿Qué es lo que me conmueve de esto? ¿Es el color? ¿Es la forma? ¿Es la textura?" Y a partir de ello, puede empezar a perfeccionarlo.

Me encanta la idea de que todos deberían disfrutar de un buen diseño. Crecí con una madre que era enfermera. No ganaba mucho dinero, pero siempre teníamos un buen diseño. Siempre hablábamos de cosas hermosas. Me inculcó la idea de que hay que comprar cosas que nos gusten. No se trata de llenar un espacio, ni de tener un cuadro entero para que los vecinos lo admiren. Se trata de crear un santuario para uno mismo.

¿Tiene una norma n.º 1 de diseño?

Danielle: Sí, tengo una norma de diseño: elegir los espacios pequeños e íntimos y mejorarlos. Ponerles un color intenso, que sea un color oscuro, profundo e interesante. Estoy cansada de escuchar: "Tenemos que pintar todo de blanco porque nos da miedo usar color". Ya sea que se trate de un pasillo pequeño para decorar, porque allí es donde puede hacer algo muy increíble, mágico y sobresaliente.

"NO HAY NADA MEJOR QUE EL COLOR PARA TRANSFORMAR UN ESPACIO".

 - Danielle Colding,
   directora de dcdny Interior Design

¿De qué maneras aprovecha la pintura con los demás elementos del diseño?

Danielle: Lo más importante de diseñar un espacio es considerar todas las superficies. Piense en las molduras. ¿Deben ser blancas? No. De hecho, últimamente he disfrutado mucho de pintar las molduras del mismo color que las paredes y, quizás, pintar las puertas de otra manera.

¿Qué es mejor que una puerta pintada de negro? Recuerdo que Tom Fleming hizo un espacio que tenía ramio de color salmón, zócalos y molduras de color salmón, y todas las puertas eran de color negro brillante. Dios mío, ¡qué hermoso! Una puerta en negro brillante no dará una sensación de pesadez ni de oscuridad, sino una clásica y perfecta. Por eso el diseño es tan divertido.

Todos hemos visto cocinas bien saturadas, donde la pared tiene el mismo color que los gabinetes. No hay nada mejor que el color para transformar un espacio, y pintar es en verdad la forma más sencilla, directa y eficaz de lograrlo. Además, es accesible para todos. Es lo más bonito de eso. Por otro lado, si estropea la pintura o no le gusta, solo vuelva a hacerlo. De alguna manera, me encanta eso.

¿Qué nos dice de los techos?

Danielle: Una de las superficies que suele descuidarse es el techo. Me encanta pintar la moldura de la corona y el techo del mismo color. No hay nada mejor que un turquesa o, si tiene el presupuesto, un gran techo con alto brillo, o laca. Se ve fantástico, como si realzara la habitación.

No se aferre a la idea de usar blanco para las molduras, las puertas y el techo. No existe un reglamento que diga que debe ser así.

¿Tiene un "blanco perfecto"?

Danielle: El blanco posee una cualidad de perfección, en especial cuando se consigue el tono correcto de blanco. A inicios de mi carrera, aprendí la fórmula para obtener el blanco perfecto: mitad de lino y mitad de blanco*. Es limpio, pero crema. El blanco puede ser muy amarillo. También, puede ser muy blanco en un espacio moderno, como el Blanco Decorador que, en mi opinión, es un poco demasiado frío.

Me encanta el Simplemente Blanco OC-117 de Benjamin Moore. Aunque mi blanco perfecto es la combinación de mitad de lino y mitad de blanco, el Simplemente Blanco se parece mucho: es limpio y crema.

*Danielle solicita a su comerciante local que vende productos de Benjamin Moore que combine la fórmula de colores para Blanco Lino OC-146 y blanco OC-151, de modo que el resultado final de color es la mitad de cada uno.

Si fuera un color, ¿cuál sería?

Danielle: Elegiría un azul verde muy profundo. Además, los colores históricos de Benjamin Moore son mis favoritos.

¿Tiene alguna preferencia en cuanto a los tipos de encargos? ¿Residencial o comercial?

Danielle: Me encargo de proyectos tanto residenciales como comerciales. Creo que la principal diferencia entre ambos está en el dramatismo. En un espacio comercial o de hotelería, se quiere lograr ese efecto sorprendente que las personas sin duda van a recordar. No quiere decir que deba ser exagerado y alocado; simplemente, tiene que haber cierta escala y dramatismo, que es muy, muy importante.

¿Algún encargo de diseño con el que sueñe?

Danielle: Me encantaría hacer un hotel boutique pequeño en algún lugar en la playa, o un castillo en el campo francés. En un hotel boutique, haría que cada habitación fuera diferente e instalaría antigüedades locales. Y si se tratara de un castillo, tendría 25 habitaciones, cada una tendría una sensación totalmente diferente, pero con la misma cohesión.

¿Cuáles son los mejores tres consejos que le daría a un diseñador joven y prometedor?

Danielle: El primero es mantenerse fiel a su visión. Suceden muchas cosas en el mundo del diseño. Existen muchos diseñadores que están haciendo cosas increíbles. Es muy, muy importante que no se compare. Debe tener cierta visión estrecha. El éxito vendrá de su creatividad. Concéntrese en eso.

El segundo es comprender que trabaja en colaboración. No se le contrata como artista, por lo que es importante que sea flexible. Además, el objetivo debe ser tener la mejor versión posible de lo que la casa del cliente representa para él o ella. Su visión es importante, y para eso se le contrata, pero la casa no es suya. Aporte la elegancia, el estilo, el color y su experiencia, pero hágalo para el cliente. Sea flexible.

El tercero es ser amable. Sea amable con las personas con las que trabaja. Esto no es tan serio. Se trata de nuestros empleos y trabajos, así que solemos invertir mucho en ellos, pero tampoco vamos a salvar al mundo. Tenemos una posición privilegiada para tratar de hacer que el mundo sea un poco más bello. Solo sea amable.