Mezcla y superposición de estilos de diseño

Lea las opiniones de Carl D'Aquino y Francine Monaco:

Carl D'Aquino y su socia comercial, Francine Monaco, el reconocido dúo del galardonado estudio de diseño D'Aquino Monaco, se reunieron en la casa de campo de D'Aquino, en el norte del estado de Nueva York, para explorar el arte de mezclar y superponer diversos estilos de diseño.

La conversación comienza en la cocina, dadas las capas de arquitectura del espacio y los diversos elementos decorativos que hay en él.

Mientras D'Aquino hace un recorrido del espacio de la cocina, el diseñador señala la mezcla de culturas francesa, italiana y estadounidense en su diseño, haciendo un guiño a la valoración de todas las épocas. En su espacio de cocina, D'Aquino eligió una mesa francesa de 150 años y sillas de época, mosaicos marroquíes en las paredes y gabinetes grises sumamente laqueados; todo esto encaja naturalmente con un asombroso techo de hojalata.

"Es una mezcla de las culturas francesa, italiana y estadounidense". comenta D'Aquino. "Realmente tenemos pasión por todas las épocas".

Dirigiéndose a la sala de estar, Monaco y D'Aquino hablan de dos piezas que reflejan el gusto del equipo por las mezclas y superposiciones: una mesa redonda de mármol blanco, aproximadamente del año 1970 de Angelo Mangiarotti, uno de los diseñadores favoritos de D'Aquino; y dos sofás ligeramente curvos de la decoradora/anticuaria francesa Madeline Castaing de alrededor de los años 1950, comprados a la casa de subastas Pierre Bergé.

"La colección personal sobre la repisa de la chimenea es mi colección de recuerdos", señala D'Aquino. "Cada pieza tiene un recuerdo y no está dispuesta en forma dinámica. Es solo algo que disfruto ver. Y me recuerda a momentos especiales de mi vida".

También hay nueve paneles de papel pintado, Carlos X, de aproximadamente 1850, que se dividieron para rodear la sala de estar. Los murales conmemoran el primer vuelo en globo aerostático sobre París. "Se ajustan a la habitación, en ambas esquinas", dice Monaco, agregando lo bien que funcionan contra el fondo azul.

Para instalarlos, el equipo envolvió las esquinas de la sala y creó un movimiento fluido, un bonito contraste con la arquitectura axial, estática, colonial de la habitación.

"Simplemente quedan grandiosos en este espacio", dice Monaco. "Y es algo que realmente nunca podrías planear ni diseñar en la habitación". Hay 'hallazgos' muy especiales que hay que saber de antemano y es necesario encontrar el entorno adecuado, la dinámica espacial justa que acoja y muestre tesoros únicos".

Alentar a los clientes con ediciones de diseño bien pensadas

Cuando se trata de trabajar con clientes, D'Aquino aconseja que no se los puede llevar adonde no quieren estar. "Uno no quiere tener una batalla. Quiere un diálogo. Es una relación de trabajo y ellos son los que van a vivir en el lugar. Así que hay que encontrar un camino con ellos, a través de este proceso educativo".

"Hoy, con el amplio acceso a todos los tipos de información e inteligencia en línea", observa Monaco. "El cliente tiene más vocabulario. Pero de todos modos recurren a ti, el diseñador, para obtener tu opinión, tus conocimientos. Continúan recurriendo a ti para que seas el crítico, el editor".

"Es una colaboración, es un diálogo, del que formamos parte y que disfrutamos mucho", señala D'Aquino.

"En su forma más simple, el diseño se trata de elegir", aconseja Monaco con el acuerdo de D'Aquino. "Se trata de descubrir. Se trata de crear. Se trata de editar. Todos estos son aspectos del diseño".